Sigue a Jesús
Para los nuevos creyentes
No importa quién seas o lo que hayas hecho, Jesús te ama y ha hecho un camino para que puedas tener una relación con Él para siempre.
En el siguiente video, Nick Vujicic explica quién es Jesús y cómo puedes comenzar una nueva vida a través de Él. Si oras para recibir y seguir a Jesús, por favor háznoslo saber haciendo clic en el botón “Acepté a Jesús” y te enviaremos siete videos durante siete días para ayudarte a crecer en tu relación con Jesucristo.
Vídeo disponible en 36 idiomas
¿Cómo me convierto en Cristiano?
Entender
En primer lugar, entiende y acepta que eres un pecador.
La definición del pecado es simple. El pecado es romper la ley de Dios. Incluso las personas de buen corazón que hacen cosas buenas no pueden agradar a Dios ni obtener Su aprobación. ¡El estándar en la Biblia es increíblemente alto! Ninguno de nosotros puede alcanzar la perfección o siquiera acercarse a ella. No importa cuánto lo intentes, nunca serás lo suficientemente bueno. La Biblia dice que todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23). El pecado es el principal obstáculo entre tú y Dios. De hecho, la Biblia enseña que nuestro pecado es una sentencia de muerte. Romanos 6:23 dice,
"La paga del pecado es muerte".
Es algo fuerte, pero eso es lo que enseña la Biblia.
Reconocer
En segundo lugar, reconoce que Jesucristo murió en la cruz por ti.
Dios proporcionó la solución definitiva a nuestro pecado. Primero debes reconocer que el Hijo de Dios dio su vida por ti. Estas son las buenas nuevas. Romanos 5:8 dice,
"En esto demuestra Dios su amor por nosotros: Siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros".
Jesucristo murió en nuestro lugar, a pesar de que merecíamos la muerte. Lo hizo para que podamos tener verdadera paz y disfrutar de una relación con Él. Lo hizo para que podamos ir al cielo.
Arrepentimiento
Tercero, arrepiéntete de tu pecado.
Después de admitir tu condición pecaminosa, y después de reconocer las buenas nuevas de la muerte de Jesús en tu lugar, ahora es el momento de pedir perdón. Confiesa que has hecho lo incorrecto y arrepiéntete de tu pecado. Arrepentirse significa alejarse, rechazar vivir en el patrón de tus malas acciones y acercarte a Dios con todo tu corazón. Hechos 3:19 dice,
"Arrepiéntete de tus pecados y vuélvete a Dios, para que tus pecados sean borrados".
Aceptar
Cuarto, acepta a Jesucristo en tu corazón y en tu vida.
Para ser salvo se requiere un paso de creer. Se requiere un paso de fe hacia el Único que puede salvarte. La Biblia nos dice que la salvación no se encuentra en nadie más, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres por el cual podamos ser salvos. (Hechos 4:12) ¡Jesús no es un camino hacia Dios, Él es el único camino hacia Dios! Juan 14:6 dice,
"Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí".
¿Quieres que Jesús sea el Señor de tu vida? ¿Estás listo para vivir tu vida en fe y obediencia a Él? Entonces pídele a Jesús que entre en tu vida ahora mismo. Jesús dijo: "¡Aquí estoy! Estoy a la puerta y llamo. Si alguien oye mi voz y abre la puerta, entraré". (Ap. 3:20)
Orar
Quinto, detente un momento y ora.
Si quieres comenzar tu relación con Cristo, detente un momento y ora.
Puedes usar tus propias palabras cuando hables con Dios. Expresa tus pensamientos de la manera que te parezca más natural. Lo más importante es que tu conversación con Dios sea totalmente sincera y siga el ejemplo de la Biblia:
"que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo". (Romanos 10:9.)
Este es un ejemplo sencillo de las palabras que podrías utilizar para orar...
Jesús,
Reconozco que soy un pecador. Estoy separado de Ti por causa de mi pecado. Pero ahora entiendo que Tú viniste y moriste en mi lugar para encargarte completamente de mi problema de pecado. Estoy listo para arrepentirme de mi pecado, dar la vuelta y acercarme a Ti. Confieso con estas palabras que Jesús es mi Señor y Salvador. Señor, creo que fuiste resucitado de entre los muertos por mí. Gracias por salvarme. Amén.
Si has hecho esta oración, Jesucristo ha entrado en tu vida. Tu decisión de seguirle significa que Dios te ha perdonado. Pasarás la eternidad en el cielo con Él.